Guía de siembra: Caigua Criolla
Guía para el cultivo de Caigua:
- La caigua es una hortaliza trepadora de frutos verdes y alargados, conocida por su uso en guisos, ensaladas y rellenos.
- Se desarrolla mejor en climas cálidos y templados y requiere suelos bien drenados, ricos en materia orgánica.
- Puede cultivarse en macetas grandes o en campo abierto, con tutores o enrejados para su crecimiento vertical.
- El riego debe ser moderado y constante.
- La cosecha se realiza cuando los frutos alcanzan entre 8 y 12 cm de largo, antes de que las semillas se endurezcan.
Clima y época de siembra:
- La caigua es una planta trepadora originaria de los Andes, especialmente de Perú y Bolivia.
- Prefiere climas cálidos y templados, con temperaturas ideales entre 18 °C y 28 °C.
- Es recomendable sembrarla en primavera, una vez que las heladas hayan pasado, para aprovechar la temporada cálida.
Método de siembra:
- La caigua se puede sembrar directamente en el suelo o en semilleros para luego trasplantar.
- Siembra las semillas a una profundidad de 1 a 2 cm, con una distancia de 30 a 45 cm entre plantas y 60 cm entre filas.
- Mantén el sustrato húmedo pero no encharcado.
- La germinación suele ocurrir entre 7 y 14 días, dependiendo de las condiciones de temperatura y humedad.
- Recomendamos macetas de al menos 20 litros por planta para un optimo desarrollo.
Fertilización:
- La caigua prefiere suelos ricos en materia orgánica y bien drenados.
- Antes de la siembra, incorpora compost o abono orgánico al suelo para mejorar su fertilidad.
- Durante el crecimiento, puedes aplicar fertilizantes equilibrados en nitrógeno, fósforo y potasio, siguiendo las recomendaciones específicas para cada tipo de fertilizante.
- Evita el exceso de nitrógeno en la etapa de floración y fructificación, ya que puede favorecer el crecimiento de las hojas en detrimento del desarrollo y cuaje del fruto.
Días para la cosecha:
- La caigua está lista para la cosecha entre 60 y 90 días después de la siembra, dependiendo de la variedad y las condiciones de cultivo.
- Es recomendable cosechar los frutos cuando aún están tiernos y de color verde brillante, antes de que maduren y se vuelvan amarillos.
- La cosecha puede realizarse durante todo el año, especialmente si se protegen las plantas de heladas severas.