Guía de siembra: Beterraga Early Wonder
			Guía para el cultivo de Beterraga:
		
	- La beterraga es una raíz comestible de color rojo intenso, con un sabor dulce y terroso, utilizada en ensaladas, jugos y guisos.
 - Se adapta bien a climas templados, con temperaturas entre 15 °C y 25 °C, y prefiere suelos sueltos, bien drenados y ricos en materia orgánica.
 - Puede cultivarse en macetas profundas o en campo abierto, con riego moderado y constante para evitar que las raíces se endurezcan.
 
Clima y época de siembra:
- La betarraga es una planta que se adapta a climas templados y frescos, con temperaturas ideales entre 10 °C y 20 °C.
 - En climas templados su cultivo puede realizarse todo el año.
 
Método de siembra:
- La betarraga se puede sembrar directamente en el suelo o en almácigos para luego trasplantar.
 - Siembra las semillas a una profundidad de 1 cm, con una distancia de 5 a 10 cm entre ellas.
 - Mantén el sustrato húmedo pero no encharcado.
 - La germinación suele ocurrir entre 7 y 14 días, dependiendo de las condiciones de temperatura y humedad.
 
- Recomendamos macetas de al menos 5 litros por planta para un optimo desarrollo.
 
Fertilización:
- La betarraga prefiere suelos ricos en materia orgánica y bien drenados.
 - Antes de la siembra, incorpora compost o abono orgánico al suelo para mejorar su fertilidad.
 - Durante el crecimiento, puedes aplicar fertilizantes equilibrados en nitrógeno, fósforo y potasio, siguiendo las recomendaciones específicas para cada tipo de fertilizante.
 - Evita el exceso de nitrógeno, ya que puede favorecer el crecimiento de las hojas en detrimento del desarrollo de la raíz.
 
Días para la germinación:
- Las semillas de betarraga germinan en aproximadamente 7 a 14 días después de la siembra, dependiendo de las condiciones de temperatura y humedad.
 
Días para la cosecha:
- La betarraga está lista para la cosecha entre 50 y 70 días después de la siembra, dependiendo de las condiciones de cultivo y del tamaño deseado de la raíz.
 - Es recomendable cosechar cuando las raíces tengan un tamaño adecuado y antes de que la planta florezca, ya que la floración puede afectar la calidad de la raíz.